Cuatro puntos que pueden mejorar tu día.

No se trata de dormir mucho si no de descansar mejor. Pasamos un tercio de nuestra vida durmiendo y tiene mucho sentido porque gracias al sueño, tanto la mente como el cuerpo, entran en un estado de autocuración y autoregeneración que son indispensables para mantener una vida sana, vital y feliz.
Hay muchas formas de conseguir un sueño mejor, empezando por el colchón o las almohadas que usas, la temperatura de la habitación, la luz, etc. pero todos estos factores la mayoría de las veces no son tan fáciles de cambiar porque no tienes previsto comprar una nueva cama o un nuevo colchón o una almohada y no puedes cambiarte de habitación para dormir mejor en otra parte, etc. Todo eso lo sabemos de sobra, por lo que te proponemos cuatro cosas que te ayudarán a dormir mejor y que si puedes hacer.
El cerebro necesita algunos días para adoptar las rutinas que le impones, como el cuerpo necesita unos días para sentirse a gusto con los nuevos ejercicios, así que es importante que repitas estas acciones por, al menos, tres semanas, hasta que se conviertan en una rutina que tu mente aceptará sin problema alguno.
Fija una hora para irte a dormir
Repetir los horarios hace que el cuerpo descanse mejor. Es común que la gente se vaya a dormir cuando acaba sus tareas del día, al menos hasta donde alcanzan sus fuerzas, pero lo que nos interesa es cuadrar estas acciones para que nuestra mente envíe las señales químicas necesarias para el sueño a una hora determinada, así se elimina el estrés que producen las tareas de última hora y entrenas tu cuerpo para que mantenga un ritmo dentro de un horario. Por ejemplo, si acostumbras a tu cuerpo y mente que se vaya a dormir a las 23:30 y te levantas a las 7:30, habrás descansado ocho horas, que es lo ideal y la repetición hará que poco a poco, en torno a esa hora tu cerebro empiece a enviar señales a tu cuerpo de que tienes sueño y adquirirás el hábito.
Debes repetir: “De esto me voy a ocupar mañana”
Hay que descargar la mente de lo que nos preocupa para descansar mejor. Todos nos vamos a la cama con pensamientos y preocupaciones que son muy importantes para nosotros, pero tenemos que aprender que hay una cantidad de tiempo durante el día para resolverlas y que, por lo general, muchas de nuestras preocupaciones no llegan a convertirse en verdaderos problemas. Así que cuando llegue la hora de acostarte y no puedas dejar de pensar en “eso” que tanta urgencia tiene debes apuntarlo y repetirte “De esto me ocuparé mañana”, comprobarás que, en la mayoría de los casos, esperar ocho horas de sueño para resolver alguna cuestión es mejor que intentar hacerlo a última hora del día.
La cama es “sólo para dormir”
Destina un lugar para dormir y nada más. Aunque muchos no están de acuerdo, está científicamente demostrado, por ejemplo, que tanto comer viendo la televisión como irse a la cama viendo la televisión no es lo mejor para los seres humanos (el caso de la comida lo trataremos en otro momento) en el caso de dormir, aunque te duermas habitualmente viendo la televisión es mejor que tu cuerpo se acostumbre a que cuando se meta en la cama sea para dormir, esto no significa que no puedas hacer lo obvio en la cama todas las veces que quieras, si no, que es beneficioso para tu mente y tu cuerpo que los mensajes sean claros, “si me voy a la cama es porque quiero dormir” el cerebro lo entiende actúa en consecuencia.
Date un baño caliente de 15 minutos antes de dormir.
Un baño caliente es un premio al final del día. Así como a los bebes se los baña antes de meterlos en la cama y así estos se duermen mejor (repitiendo la rutina) de adultos es igual, así que es una buena idea darte un baño relajante de 15 minutos antes de irte a la cama, esto hará que, después del baño, la temperatura corporal baje y eso será un mensaje para el cuerpo de que “debe descansar” además es un hábito muy saludable para cerrar el día con un momento de relajación sólo para ti y con todo ello descansarás mejor por la noche.
Dormir y descansar mejor puede ser un buen objetivo personal para este nuevo año y estos sencillos trucos te ayudarán a que tengas una rutina que te induzca al sueño de manera relajada y así descansar profundamente, cuanto más profundo es el sueño es más beneficioso y reparador, nada nos ayuda a vernos y sentirnos mejor como dormir ocho horas, pruébalo, si lo haces verás que tus noches para dormir mejoran y tu salud y tu energía también.
Revista609.-